¿Encontrar alivio con la dieta blanda?: Esto es todo lo que debes saber

Dieta blanda

¿Alguna vez te has enfermado y una de las medidas de cuidado que te han recomendado es la dieta blanda? Estamos seguros de que a todos en algún momento de nuestra vida nos han pedido seguir este tipo de alimentación y a continuación, te compartiremos cuáles son los beneficios y cómo surgió. 

¿Qué es la dieta blanda? 

Una dieta blanda es un tipo de régimen alimenticio que consiste en comer alimentos fáciles de digerir y bajos en fibra, sin exceso de condimentos o especias y otros irritantes. El propósito es promover una fácil digestión mediante la ingesta de alimentos con bajo contenido en grasas, ácidos, salsas o alcohol que puedan estimular la secreción de jugos gástricos para así favorecer la recuperación y adaptación de forma progresiva del organismo a la alimentación cotidiana. 

Esta dieta a menudo se recomienda para personas que experimentan problemas digestivos como náuseas, vómitos, diarrea o acidez estomacal, pero también para pacientes que padecen úlceras, reflujo gastroesofágico, gastritis, hernia de hiato o como dieta en postoperatorio en cirugía digestiva. 

La dieta blanda también es conocida como dieta de protección gástrica. Esto quiere decir que está diseñada para proteger el revestimiento del estómago y reducir el riesgo de problemas gastrointestinales como reflujo ácido, gastritis y úlceras pépticas. 

La dieta blanda se introdujo por primera vez a fines del siglo XIX por un médico llamado Dr. Henry Bland. Inicialmente, la dieta estaba destinada a pacientes con trastornos gastrointestinales, como úlceras, gastritis y otros problemas digestivos. Esta dieta generalmente se recomienda por un corto periodo de tiempo hasta que los síntomas digestivos mejoren. 

Vale la pena resaltar las recomendaciones específicas para una dieta de protección gástrica pueden variar según la condición específica y el historial médico del individuo. Antes de adoptar cualquier régimen alimenticio, la mejor idea es siempre consultarlo con un profesional de la salud o un dietista registrado para obtener recomendaciones dietéticas personalizadas. 

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Recomendaciones para consumir la dieta blanda

La dieta blanda generalmente se recomienda para personas que tienen dificultad para comer alimentos sólidos a causa de problemas de salud, tras cirugías, problemas dentales o problemas digestivos. A continuación, te presentamos algunas recomendaciones generales que te pueden ayudar cuando necesites una dieta blanda:

• Evita los alimentos picantes o muy condimentados: estos pueden irritar el sistema digestivo y empeorar los síntomas.
• Los alimentos bajos en grasas serán tus mejores amigos: los alimentos ricos en grasas también pueden causar molestias digestivas, así que opte por proteínas magras, como pollo, pescado y tofu, y productos lácteos bajos en grasas.
• Opta por porciones más pequeñas y frecuentes: esto puede ayudar a reducir la tensión en tu sistema digestivo.
• Evita el alcohol y la cafeína: ambos pueden irritar el sistema digestivo y aumentar los síntomas.
• Cocina bien la comida: esto puede ayudar a que sea más fácil de digerir, puedes optar por hervir la comida. 
• Elige frutas y verduras suaves y no ácidas: los ejemplos incluyen plátanos, puré de manzana, zanahorias cocidas y judías verdes.
• Evita las bebidas carbonatadas: estas pueden causar hinchazón, dolor y molestias.
• Beber mucha agua: mantenerse hidratado puede ayudar a que el sistema digestivo funcione correctamente.

Recuerda que el cuerpo de cada persona es diferente, por lo que es importante trabajar con un profesional de la salud para desarrollar una dieta blanda que sea adecuada para las necesidades individuales.

Beneficios de la dieta blanda

Algunos beneficios potenciales de una dieta blanda incluyen:

• Es más fácil de masticar: una dieta blanda consiste en alimentos que son fáciles de masticar y tragar, lo que la convierte en una opción ideal para las personas que tienen dificultad para masticar o tragar.
• Tensión digestiva reducida: los alimentos blandos suelen ser fáciles de digerir, lo que puede reducir la tensión en el sistema digestivo. Esto puede ser particularmente beneficioso para las personas con problemas digestivos, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) o la enfermedad inflamatoria intestinal (EII).
• Promueve la curación: después de la cirugía dental, una dieta blanda puede ayudar a promover la curación al reducir el riesgo de irritación o lesión en el sitio quirúrgico.
• Es muy nutritiva: una dieta blanda puede ser nutritiva si incluye una variedad de alimentos saludables, como verduras cocidas, frutas, proteínas magras y cereales integrales.
• Versátil: hay muchas opciones de alimentos blandos, lo que significa que una dieta blanda puede ser variada e interesante. Esto puede ayudar a prevenir el aburrimiento y garantizar que las personas obtengan los nutrientes que necesitan.
• Promueve la disminución de secreción de jugos gástricos: cuando masticamos la comida, se descompone en pedazos pequeños y la saliva contiene enzimas que ayudan a comenzar el proceso de digestión, lo que a su vez le avisa al estómago que produzca jugos gástricos. La dieta blanda ayuda a reducir esa secreción. 

Es importante tener en cuenta que una dieta blanda no debe seguirse a largo plazo sin consultar a un profesional de la salud, ya que es posible que no proporcione todos los nutrientes necesarios para mantener un buen estado de salud. 

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¿Qué tipos de alimentos se consumen en una dieta blanda?

Aquí te compartimos una lista de los alimentos que se recomiendan a la hora de llevar una dieta blanda: 

• Cereales refinados: incluye pastas, pan blanco o pan tostado, arroz blanco.
• Féculas: como las papas hervidas o al vapor en puré o como cremas.
• Carnes blancas y pescados: incluye el pollo, la ternera o el pavo hervidos, cocidos al horno o a la plancha y el pavo puede consumirse lonjas de jamón de york. Por otro lado, el pescado siempre debe ser blanco.
• Huevos: pueden incorporarse huevos en tortilla, pero inicialmente solo podrá consumirse la clara y si el paciente lo tolera puede incluirse la yema.
• Verduras: deben consumirse cocidas, en puré o caldos. No se recomiendan los vegetales y hortalizas crudas como brócoli, los espárragos y la coliflor, ya que estos son irritables.
• Legumbres: inicialmente se debe consumir pequeñas cantidades cocidas o en puré para determinar la tolerancia.
• Frutas: hay una variedad de frutas no ácidas que se pueden consumir, se recomiendan cocidas, al horno o en puré, pero sin añadir azúcar.
• Grasas: en la menor cantidad posible para evitar la secreción de bilis. Se recomienda específicamente reemplazar la mantequilla o margarina por el aceite de oliva en dosis muy mínimas. 
• Bebidas: se recomienda beber agua, infusiones de hierbas, caldos y algunos zumos de fruta que eviten la irritación intestinal.

¿Qué alimentos debo evitar en la dieta blanda?

Esencialmente, deben evitarse todos aquellos alimentos fritos, frutas y verduras crudas, carnes grasas, salsas, picantes, condimentos, alimentos ácidos, alcohol, cafeína, frutos secos o cereales. Algunas recomendaciones más específicas son:

• Cereales integrales.
• Frutos secos: maní, almendras, nueces.
• Lácteos grasos: leche entera, quesos secos o muy curados, queso crema, postres como flan, natilla o pudin.
• Carnes rojas grasas.
• Pescado graso (especialmente el azul).
• Mariscos.
• Embutidos.
• Enlatados.
• Verduras flatulentas (pepino o cebolla).
• Cualquier tipo de frutas o verdura crudas.
• Frutas ácidas o zumos cítricos como la naranja, maracuyá, lulo, limón, mandarina, etc.
• Alimentos con elevados niveles de sal (sodio).
• Alimentos muy azucarados.
• Condimentos picantes.
• Café, gaseosas, chocolate y alcohol.
• Tabaco.
• Vinagre.
• Empaquetados, salsas, estofados, rebozados.

Ejemplos de dieta blanda para un día

Si es tu primera vez probando la dieta blanda por cuestiones de salud, queremos compartir contigo un ejemplo de comidas que te pueden ayudar:

- Desayuno:

• Huevos revueltos.
• Puré de aguacate
• Batido hecho con yogur, plátano o frutas blandas como arándanos

- Almuerzo:

• Crema de champiñones
• Sándwich de pan blanco suave con ensalada de puré de atún o ensalada de pollo
• Zanahorias cocidas

- Snacks:

• Puré de manzana o puré de plátanos
• Yogur griego

- Cena:

• Filete de pescado al horno o pechuga de pollo con puré de patatas
• Verduras al vapor 
• Gelatina de postre

Por último, es esencial entender que este tipo de recomendaciones son generales y no aplican a una enfermedad o trastorno específico, para ello debes consultar a un nutricionista que prescriba de forma específica el régimen alimenticio que deberás acatar.

Si deseas obtener mayor información sobre los beneficios y las opciones de recetas en la dieta blanda, te invitamos a que visites nuestro blog. En Método NEC contamos con un grupo de profesionales médicos que están listos para ayudarte si quieres reducir medidas de forma segura.